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Isabel Díaz Ayuso intentando tapar su incapacidad con banderas |
La primera, que es la que
yo prefiero, tiene que ver con una coplilla de los años 60 y 70 (que hoy no sería
popular por ser políticamente incorrecta) que decía: “Me casé con un enano por
hartarme de reír”.
Con ello quiero pensar
que los madrileños eran plenamente conscientes de que escogían a una iletrada
para el cargo, una inexperta en todo porque no ha vivido fuera de la sombra del
partido, pero que lo asumían por la diversión que podía traerles.
Me gusta pensar que la nombraron para reírse cuando explicara que su experiencia laboral era coordinar la cuenta de twitter del perro de Esperanza Aguirre. Algo así como lo que dice la canción de que al bajarse de la cama el pobre enano se caía de cabeza en el orinal.
Si les parece demasiado
cruel les cuento la otra teoría que me viene a la cabeza, y que considero mucho
peor, porque supone que los madrileños ni siquiera la eligieron sino que fue
nombrada por el presidente del PP, Pablo Casado.
Como Casado es un
incompetente, tan incapaz de acabar la carrera que el partido tuvo que
regalarle el título, es un inseguro porque sabe que ocupa un cargo para el que
no tiene ni preparación, ni experiencia, ni capacidad.
Y esas personas tienden a
rodearse de gente más incompetente que
ellos, para que no les hagan sombra, y por eso nombro a Díaz Ayuso. Lo peor es
que me imagino que ese será el perfil de los nombramientos de Casado si llega a mandar algún día. Estamos avisados.
BASTA DE REPRESIÓN
AMNISTÍA PRESOS POLÍTICOS
AUTODETERMINACIÓN
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