¿Quién ofende a España? (Castellano)

Sr. Jorge Fernández Díaz
Ministro de Interior

Señor.

Usted está haciendo una ley que, entre otras cosas, pretende multar hasta con 30.000 euros a quien ofenda a España pero, como siempre, el problema es que no aclara qué se considera “ofensa” y solo menciona la quema de la bandera. Cualquier país, que tenga la libertad y la soberanía de sus ciudadanos por encima de todo, sabe que ello supone también respetar el derecho de cada uno de esos ciudadanos a quemar la bandera.

Sr. Ministro, hay muchas cosas que cualquiera consideraría que ofenden más que la quema de una bandera, por ejemplo que los crímenes del franquismo tengan que ser juzgados en Argentina después de que ustedes no hicieran caso al requerimiento de la ONU, o que Europa tenga que enmendarnos una iniciativa por ser tan chapuceros, ya sea la doctrina Parot, las ayudas a los astilleros, una ley de desahucios considerada abusiva e ilegal, y un largo etcétera que ya empieza a ser demasiado vergonzoso, al que se añade su ley de la que los europeos se preguntan para qué quiere una norma tan restrictiva un país supuestamente democrático.

¿Acaso no es una grave ofensa al país la falta de dimisiones en su partido, después de que un juez haya confirmado que había una contabilidad B desde hace décadas, y de que el propio presidente del Gobierno reconociera que parte de los apuntes del Sr. Bárcenas eran ciertos? ¿Y qué me dice de la sentencia que asegura que la Sra. Cospedal ha tenido “una conducta indigna, deplorable e impropia de un cargo público“, a la que su partido ha arropado al permitirle sacar una nota diciendo que está “satisfecha” con la sentencia?

Sr. Ministro, ¿no es más indigno el haber hipotecado al país durante décadas, con el dinero que no teníamos, para hacer obras que no necesitábamos? ¿No le parece más indigno el tener una tasa de paro escandalosa o que los jóvenes no tengan aquí ningún futuro?

También creo que ofende más a la dignidad del país la muerte de 40 personas en un accidente de metro en Valencia y que la televisión autonómica, en manos de su partido, imponga la censura informativa, hasta que el Sr. Jordi Evole vuelve a despertar las conciencias de valencianos y españoles años después.

Usted sabe que podría continuar recordándole cosas, que cualquiera consideraría peores que quemar una bandera, así que, si se considera el guardián de la dignidad de España, busque donde realmente están los que la mancillan y la desacreditan.