Que decepción oír
a Pedro Sánchez pidiendo que olvidemos el 1-O. Claro que de alguien que apoyó
la represión y la aplicación del 155, contra gente pacífica que sólo quería
votar, quizá no se podía esperar gran cosa.
Es curioso que el
olvido es la solución que siempre nos proponen a los españoles, sin ir más
lejos, Pablo Casado dice que nos olvidemos de los 140.000 muertos que aún
tenemos en las cunetas víctimas de la guerra y la represión.
Y la propuesta no
es nueva, porque en la Transición nos pidieron que nos olvidáramos de los
crímenes de la dictadura con una ley de amnistía total, a pesar de que nadie
había sido acusado, y mucho menos procesado, por tales delitos.
También la corona
nos pidió que nos olvidáramos de que la había reinstaurado un dictador
fascista, y el mismo Franco pidió que nos olvidáramos de la República, después
de haberla traicionado a ella y a los españoles.
¿No nos piden que
olvidemos demasiado? ¿Qué estamos diciendo al olvidar?
¿Que el
franquismo era legítimo y debemos dar la república por perdida? ¿Qué la
traición a España, que fue el 18 de julio, fue justa? ¿Qué se merecían la
represión y por eso los muertos están mejor en las cunetas que bien enterrados?
¿Que los juicios y
condenas de la dictadura fueron correctos y legítimos por ajustarse a la ley
franquista? ¿Que debemos aceptar que nos pegaran el 1-O porque en una
democracia votar es ilegal y las diferencias deben resolverse a palos?
¿Eso queremos? ¿Un
país que acepte que le cambien el gobierno legítimo con guerras y represión?
¿Unos ciudadanos que no respeten la memoria de sus muertos ni aspiren a
enterrarlos como Dios manda por no incomodar al capitoste de turno?
¿Quién puede
querer vivir en un país así, junto a gente tan desnaturalizada?
VIVA LA REPÚBLICA
LIBERTAD PRESOS POLÍTICOS
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