Se cumplen cinco años
del fuego de Horta de Sant Joan. Se ha hablado
tanto, ha corrido tanta tinta, se ha culpabilizado a tanta gente y se han buscado
tantos culpables políticos y de otro tipo, que creía que ya estaba juzgado,
pero no es así.
Resulta que la
Justicia es lenta y aún no se ha llevado a juicio a los pirómanos que prendieron
el fuego y provocaron el desastre. Antes, mientras aún seguíamos conmocionados
y la tormenta mediática nos sacudía, simplemente les dejaron en libertad, al cabo
de un mes y medio del incendio, después de haber pagado 6.000 euros cada uno.
Se habían negado a
declarar y no pasó nada, porqué estábamos ocupados en utilizarlo políticamente.
Tampoco habían pedido perdón a las víctimas y a sus familiares (aún no lo han
hecho) pero no nos preocupó porqué queríamos desgastar a los adversarios
políticos. No tuvimos en cuenta las fotos que se habían hecho, en actitud
burlesca, delante de las llamas que habían provocado, y que acabaron con la
vida de cinco bomberos, porqué solo contábamos los votos que aquella situación
nos quitaría o nos proporcionaría.
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