El fascismo español siempre ha sido mentiroso y manipulador.
Al ganar la guerra en la que traicionaron al país y a los españoles, se apropiaron
del nacionalismo y cambiaron el sentido de las palabras para equiparar a
asesinos y víctimas, al gobierno legítimo y al golpista.
Ahora sus herederos pretenden hacer lo mismo con la historia
europea, así que por la agresión de Serbia, con su nacionalismo imperialista,
excluyente y cargado de odio, como el español, pretenden invalidar el proceso
de independencia de Eslovenia.
No deberían engañarnos aquellos que loaron en su día la
independencia eslovena, y hoy la critican solo porque Torra ha dicho que admira
su ejemplo democrático, con un referéndum de altísima participación y mayoría
abrumadora del Si a la separación.
Como el nacionalismo español adolece de los mismos males que
el serbio, la Transición supuso más de 500 muertos, y solo la suerte impidió
que hubiera más el 1-O, con una represión gratuita que solo sirvió para romper
España definitivamente por el nordeste.
Ahora siguen cambiándole el significado a las palabras, por
eso presumen de democracia, pero impiden que Cataluña vote. Hablan de libertad,
pero hacen leyes mordaza, prohíben canciones y comentarios en las redes
sociales, y pretenden cerrar webs sin orden judicial.
Apelan a la convivencia, pero mantienen presos políticos sin
juicio y contra los que no tienen acusaciones que puedan admitir los catedráticos
de derecho penal españoles ni europeos.
Amenazan con la Constitución, pero fueron ellos los que la destruyeron
al presionar al TC para que dictara la sentencia contra el Estatut, después de
haber sido ratificado por los catalanes, lo que rompió las reglas básicas del
pacto constitucional del 78.
El problema que tienen es que ya nadie se cree sus manipulaciones.
VIVA LA REPÚBLICA
LIBERTAD PRESOS POLÍTICOS
No hay comentarios:
Publicar un comentario