Presidente de Chile |
Después de cinco días de protestas por el precio del
transporte público, el presidente de Chile ha retirado las medidas y ha pedido
perdón a los ciudadanos. También en Hong Kong se retiró la ley de extradición
rechazada en la calle.
Eso debería ser lo normal cuando se produce un gran dolor o
perjuicio en los demás: analizar la situación, rectificar cuando proceda y
excusarse de todo corazón.
Aunque no siempre tenemos la oportunidad de rehacer el mal
causado o de revertir la pérdida infringida, sí podemos pedir perdón, dar la
satisfacción moral de un “lo siento”.
Pedir perdón es una muestra de humanidad, de interés por los
demás, de connivencia con los que sufren, de que nos afecta el daño ajeno, de
que sentimos lo ocurrido, algo que nos acerca a lo que esperamos de un ser
humano y nos distancia de las alimañas.
Ha pedido perdón el rey Juan Carlos; el Papa de Roma; los
presidentes Bush y Blair; gobiernos enteros, como Alemania e Italia, por la
Guerra Mundial; Argentina y Chile, por sus dictaduras; y hasta los monjes de
Montserrat, por albergar un depredador sexual y un pederasta.
Presidenta de Hong Kong |
Hay que ser muy miserable y mala persona para causarle daño
a alguien y negarse a pedirle perdón, sin embargo en España no se prodiga: ni
los cómplices de la dictadura, ni Aznar por la guerra de Irak, ni Rajoy por el
155, ni Sánchez por no visitar a todos los heridos.
Podrán reprimir, encarcelar o censurar pero no seremos un
país normal hasta que no pidan perdón, se haga verdadera justicia sobre todos
los desmanes cometidos y los españoles decidan si desean seguir con esta monarquía
ilegítima o volver a la legalidad republicana.
ACUSO AL ESTADO POR SU
PERSECUCIÓN
AL INDEPENDENTISMO
VIVA LA REPÚBLICA
LIBERTAD PRESOS POLÍTICOS
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