Un reto para el futuro (2)

Hace unos días, en "Un reto para el futuro (1)" (ver blog), sugería un cambio de mentalidad del país. Proponía que, en lugar de intentar salir de la crisis pensando solo en la productividad, hiciéramos de Cataluña el país del mundo con un mayor Índice de Desarrollo Humano (IDH), es decir ser el país con mejor calidad de vida en base a los criterios de este indicador que engloba: sanidad, educación y economía.

El 21 de octubre escribí “9 medidas para salir de la crisis” (ver blog) y hacerlo con cierta seguridad de no volver a caer en ella. Ahora lo que me propongo es hacer 9 propuestas de futuro para reactivar la economía, crear empleo e intentar conseguir el objetivo propuesto del IDH.

Muchos pueden pensar que, en estos tiempos de crisis, estamos de suerte si no vamos a peor. ¿Pero están seguros de que no podemos hacer nada más? ¿Están convencidos de que la única manera de salir de la crisis es despachando gente y recortando servicios básicos? ¿Ven razonable que para mejorar las autopistas se aumente el precio hasta reducir los usuarios casi un 25%, para después darles subvenciones por las perdidas? ¿No ha llegado todavía la hora de hacer otras cosas? Si les parece más razonable seguir haciendo lo mismo que hasta ahora, y esperar unos resultados diferentes, no tengo nada en contra,  pero por si no es así les expondré las propuestas, divididas en tres grupos.  

1.  Las dos primeras son para crear puestos de trabajo y lograr un futuro más justo.  No es ni justo ni ético crear una sociedad con tantas diferencias sociales y tanto paro, mientras la capacidad productiva de nuestras fábricas, y por tanto la posibilidad de crear riqueza, es más alta de lo que ha sido nunca en la historia. Por eso las dos medidas son:  

1.1. La primera, reducir la jornada laboral para crear más puestos de trabajo. Ahora que a muchos trabajadores nos han recortado los sueldos más de un 10 o 15%, esta medida se podría acompañar de una reducción similar de la jornada laboral y ello debería servir para crear empleo para muchas personas paradas, y además dinamizar la industria del ocio y del esparcimiento. Podría ser clarificador estudiar las propuestas basadas en compartir el trabajo que aparecieron en los Estados Unidos durante la crisis del 1929 donde algunas empresas, como Kellogg's, puso la jornada semanal de 30 horas y demostraron que la reducción horaria no solo mejoraba el entusiasmo y la eficacia de los trabajadores, sino que la empresa también salía ganando. En 1935, después de 5 años de estas prácticas Kellogg’s hizo un estudio según el cual los costes generales habían bajado un 25%, el coste de la mano de obra se había reducido un 10%, los accidentes laborales habían disminuido un 41% y todo ello con un incremento del número de personas contratadas del 30% respecto al 1929.  

1.2.  La segunda de las propuestas creo que nos coge en inmejorable posición para desarrollarla ja que tiene que ver con la red social catalana que mencionaba en "Un reto para el futuro (1)". Hemos centrado la creación de empleo únicamente en la economía productiva para competir con el resto de los mercados y no se ha tenido en cuenta para nada el tercer sector. Es evidente que no podemos competir con según que países que producen a unos costos imposibles, pero también lo es que desde aquellos países no nos prestarán los servicios que hoy necesitamos aquí en casa. La propuesta pues es crear empleos en el tercer sector, potenciar y profesionalizar unas prestaciones que, o no se dan, o se dan parcialmente con voluntariado. Mucha gente estaría dispuesta a cobrar menos pero hacer una tarea con un contenido social ilusionante. En otras palabras, el camino para salir de la crisis debería tener más en cuenta lo que hacen empresas con contenido social como AMPANS en el Bages o LA FAGEDA en la Garrotxa, que no las multinacionales PIRELLI o GILLETTE, huidas del país para siempre. 

 

  

2.      Cinco propuestas para incrementar el comercio catalán en el mundo.

2.1. La primera es construir el corredor del Mediterráneo y conectar los puertos de Barcelona y Tarragona con la frontera. Para hacerlo es necesario crear una agencia tributaria propia que administre los dineros de nuestros impuestos y que, como mínimo, retenga aquellos que el estado reconoce que nos debe para infraestructuras y dedicarlos a esta obra fundamental para el futuro de nuestra economía y que Europa entera reclama. Aunque suponga un gasto importante, el retorno de capital multiplicará por mucho la inversión realizada.

2.2.  La segunda medida es potenciar los productos catalanes de calidad, en la línea de lo que hace la Denominación de Origen. En este sentido habría que explotar nuestro frente costero, con más de 500 Km de costa, para crear piscifactorías que exporten pescado a toda Europa. El objetivo seria hacer con el pescado lo mismo que Almería ha hecho con las fresas. 

2.3.  La tercera es una necesidad que tiene el mundo entero y que aún no tenemos bien resuelto: la sustitución del motor de combustión actual. Tenemos un problema de falta de combustible que acabará ahogando a todas las economías si no hallamos una alternativa. Quien consiga un motor que sustituya a los actuales de derivados del petróleo, que sea competitivo en su rendimiento y con posibilidades de comercialización, ganará una parte importante del pastel que supone la industria de la automoción mundial. En consecuencia todas las universidades y escuelas politécnicas deberían estar trabajando con ahínco para desarrollar motores alternativos con diferentes tipos de combustibles y, en colaboración con las empresas, haciendo pruebas con prototipos reales para analizar el rendimiento. A diferencia de lo ocurre ahora, en el futuro no habrá un único tipo de motor, sino muchos y con diferentes “combustibles”, probablemente adaptados a las realidades de cada ámbito territorial: ¿cuántos de estos serán de patentes catalanas? 

 2.4.  Un elemento fundamental para nuestro futuro es todo lo que se refiere a la industria de las ciencias de la vida: medicina, biología, biotecnología y lo que estas ramas del saber implican. Todo ello forma parte del sector social y sanitario que habría que potenciar para continuar siendo punteros a nivel mundial. Hace unos meses, ya proponía convertir Cataluña en la Florida de Europa para la asistencia y tratamiento de los ancianos europeos, lo que nos proporcionaría una posición privilegiada en los ámbitos de la sanidad, turismo e investigación en materia de vejez, con una considerable creación de puestos de trabajo de todo tipo y categorías profesionales. 

2.5.  En otro orden de cosas hay que potenciar algunas de nuestras industrias tradicionales para hacerlas más competitivas, diversificadas y de mayor calidad. 

2.5.1. Un buen ejemplo es el turismo (lo que supondría además limpiar Barcelona de los ladrones de calle que tan mala imagen dan a la ciudad).

2.5.2. Lo mismo habría que hacer con la industria del ocio (cine, teatro, literatura, videojuegos entretenimiento, etc.), que cada día tendrá  más peso en un mundo donde las fabricas trabajaran con pocos empleados i tendremos más tiempo libre. Para potenciarla habría que eliminar las actuales subvenciones, que desincentivan la calidad y substituirlas por incentivos fiscales en los beneficios finales.

  2.5.3. Pero también habría que intentar recuperar posiciones en algunas industrias en las que fuimos puteros con propuestas adecuadas a los tiempos actuales, aportando conocimiento y valor añadido proveniente de la R+D+i en lugar de querer competir con la producción en masa y los precios bajos de otros lugares. Un buen ejemplo seria el textil con tejidos inteligentes.

3.    Las dos últimas propuestas son para mejorar los suministros básicos.   

3.1.  Lo primero que hay que asegurar es el suministro de agua potable, en un país que poco a poco se va desertizando. Hay que estudiar en profundidad las necesidades y construir las depuradoras que hagan falta para garantizarlo. Como en el caso del corredor Mediterráneo había que hacerlo con los dineros que el estado reconoce que nos debe para infraestructuras, y recaudadas por la agencia tributaria propia.

3.2. Es importante para el futuro del país reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles, que por otra parte cada día serán más escasos y caros, perjudicando nuestra balanza de pagos y limitando nuestro desarrollo. Ya se ha comentado que una de las líneas en este sentido es la búsqueda de alternativas al motor de combustión. La otra es incentivar el uso de energías renovables, por ejemplo aprovechar nuestra situación geográfica, de país con bastante sol, para potenciar la transformación de la energía solar en eléctrica. Sería conveniente que todas las viviendas instalasen dispositivos para producir electricidad que pudieran emplear para consumo propio y vender el excedente, cuando se produjera, a la red eléctrica. El objetivo ha de ser disminuir el uso de combustibles fósiles o de gas en las centrales productoras de electricidad y reducir la factura de los consumidores ya que una energía barata es fundamental para el crecimiento y el bienestar del país.