Los datos del Ministerio del Interior sirven de poco porque mezclan MENAs y jóvenes extutelados con autorización de residencia en vigor y, además, van de los 16 a los 23 años, pero no recogen a los menores de esa edad.
En la página Statista (1) dicen que hemos pasado de 2.841 MENAs (en 2013) a 12.878 (en 2023), un incremento del 453,29% en 10 años. No está mal, ¿verdad?
Por su parte el ABC, en un artículo del 1/4/2025, titulado “Los datos de los MENAs que las autonomías han enviado al gobierno” (2) dice que son 16.472 a los que hay que añadir los 4.014 que hay en Canarias pendientes de destino…
Curiosamente uno esperaría que la mayoría de esos menores fueran de países en guerra, con hambrunas o conflictos importantes, pero el 67’28% proceden de Marruecos, un país sin ninguna de tales circunstancias.
Como a veces para ver claro hay que mirar las cosas al revés, es decir desde la perspectiva contraria, me pregunto qué opinaríamos si un país vecino tuviera a 20.486 menores españoles que se han escapado de su hogar.
¿Nos quedaríamos tan tranquilos como lo estamos con los hijos de los demás? Es que, hasta donde yo sé, donde tienen que estar los menores es con sus padres, por más que la situación actual se nos venda como “progresista”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario