Tras la muerte del dictador la cosa siguió igual, gracias a aquella Transacción (mejor que Transición) que nos permitió votar un día cada 4 años a cambio de que nos calláramos y no molestáramos el resto de la legislatura.
Así es como este país ha tenido el privilegio de gozar de algunos de los políticos más mediocres de Europa. Recuerden a Leire Pajín o a ese prodigio que es Mariano Rajoy, que, si su padre no hubiera arreglado lo del aceite de Redondela, quizá no habría acabado ni la EGB.
Esos mismos políticos ahora permiten que se nos vayan los jóvenes mejor formados. Un estudio del IVIE-BBVA (1) valora que, entre 2008 y 2022, han abandonado España 5.561.000 conciudadanos para poder ser algo más que un camarero con título universitario.
![]() |
Mariano Rajoy ¿Genio o beneficiado por el juicio del aceite de Redondela que su padre juzgó? |
De ellos, un tercio tenían menos de 35 años. Un 50% eran titulados superiores, y otro 20% tenían estudios secundarios post obligatorios. En fin, se nos está yendo la flor y la nata del país, aquellos que deberían construir nuestro futuro.
Pero no solo eso, el impacto económico que tiene esa fuga de cerebros lo valora el mismo estudio en 154’8 millones de Euros en 2022 (unos 2.020 millones desde 2008).
Y a cambio ¿con qué estamos sustituyendo esa pérdida de materia gris? Con gente de poca o nula formación, de otras culturas, otras religiones y otras costumbres, muchos de los cuales al llegar piden casa y dinero, no trabajo.
No hay duda, con estos genios que nos gobiernan vamos directos al desastre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario