jueves, 12 de marzo de 2020

El escándalo de la Justicia (castellano)


Que la Justicia de este país deja mucho que desear no creo que puedan ponerlo en duda ni los más acérrimos defensores de una España que se cae a pedazos, por más que traten de echar mano del cartón piedra para simular que no pasa nada.

La independencia judicial hace tiempo que ni está ni se la espera, no solo porque se encarcelen ideas políticas con delitos inventados y relatos ficticios; o porque se cambien las sentencias del TS al dictado de los intereses de la gran banca.

Permitir que un partido ejerza la acusación particular contra un gobierno elegido democráticamente, resulta una nimiedad frente al hecho de que el presidente del Tribunal Constitucional milite en el partido que le ha nombrado a dedo.

Ya no nos extraña que el Tribunal de Cuentas siga siendo una institución franquista, creada para colocar familiares de políticos (más de 100 empleados) y no para revisar las cuentas, por eso no dijo nada del despilfarro de los AVE, aeropuertos sin aviones, Castor o rescate bancario.

Andrés Betancor, de la JEC, a sueldo de C's
Además, ahora nos enteramos que al menos un juez de la JEC está a sueldo de un partido político. Sí, la misma JEC que, sin tener competencias en ello, ha dicho quien puede o no presentarse a las elecciones, ser presidente de la Generalitat o qué colores y palabras usar.

La noticia, que en cualquier país medianamente serio supondría un tremendo escándalo, se oculta aquí en defensa de la “unidad nacional”. Me pregunto quien puede creer que el país se defiende corrompiendo la justicia.

Pero lo peor es que quien ha puesto jueces a sueldo no es cualquier partido, sino el último que ha llegado, el que aún no ha gobernado en ninguna parte. ¿Cuántos jueces más tienen a sueldo los otros partidos, los que llevan años gobernándonos?

BASTA DE REPRESIÓN
AMNISTÍA PRESOS POLÍTICOS
AUTODETERMINACIÓN

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